Arjona se metió “ADENTRO” del corazón de los caleños.

Ahora que el cantautor guatemalteco, (radicado en México), Ricardo Arjona visita de nuevo a Cali, resuenan en todas las emisoras las canciones de su nuevo álbum ADENTRO, con sus sencillos “Acompáñame a estar solo”, “Mojado” y “ Pinguinos en la cama”.

Y es que a pesar de su escándalo por haber golpeado a su ex esposa, este hombre contrasta con la sensibilidad de unas letras llenas de poesía y genialidad al realizar un juego de palabras que se asemejan más a la labor de un publicista.


Recuerdo haber sido un fan de sus canciones y de comprar algunos de su discos, como ANIMAL NOCTURNO, con el cual se hizo conocer a través de varios de sus sencillos entre ellos “Mujeres”, “Primera vez” Y “ Jesús es verbo no sustantivo”, que le generó algunas críticas por parte de la iglesia. También tuve en mi poder SI EL NORTE FUERA EL SUR, un álbum variado con algunos asomos de sátira social y SIN DAÑOS A TERCEROS un trabajo muy completo haciendo alarde de su rechazo al egoísmo.

Aunque existen otros más recientes como GALERÍA CARIBE, SANTO PECADO, LADOS B Y SOLO, la verdad confieso no los adquirí, porque me cansé de su estilo, en donde sus melodías se me convirtieron en una rutina, que a pesar de su afán por innovar con fusiones de vertientes más tropicales como la salsa y el son cubano, no llenaron mis expectativas.

Sin embargo tanto fue mi afición por el corpulento intérprete, que asistí a su primer concierto en la ciudad, donde al final sólo se escucharon multitudes coreando al unísono “Se lució Ricardo, se lució” acompañado de numerosos aplausos repetidas veces.

El próximo 22 de Julio reanudará su visita musical en la Plaza de Toros y aunque deseara ir, no podría, (debido a que me encuentro incapacitado), así que si quiero escucharlo será “Adentro” pero de mi casa.

El ejercicio de escribir

A la edad de los quince años recuerdo que me incliné por la idea de escribir un diario, y aunque parezca extraño, no lo hice con el objetivo de ejercitar mi escritura ni nada que tuviera relación con la literatura.

Mi única motivación era congelar esos instantes en el tiempo, para después de muchos años poder recordar esos momentos como si mirara una fotografía.

Y el objetivo funcionó en una ocasión que me vi obligado a sacar todos los utensilios de mi cuarto, en donde por accidente me encontré de nuevo con esa máquina del tiempo que me transportó en el pasado, generando en mí una gran nostalgia.

Descubrí que en esa etapa de mi vida no me interesaba respetar los signos de puntuación ni mucho menos el orden gramatical, tampoco mantenía una linealidad temática, era como una especie de lienzo en donde lanzaba cada gama de colores, por el simple hecho de plasmar. Y como buen diario que se respete, era lo más privado y personal posible. Así que sirvió más como una terapia que me ahorró unas cuantas citas al psicólogo.

Actualmente que están tan de moda los blogs o bitácoras, me recuerda una serie de televisión, en donde un niño genio (que a su corta edad ya era un médico prestante), se sumergía cada noche en su computador para narrar lo que le había ocurrido a lo largo del día, siempre dejando una moraleja.

A diferencia de todas las experiencias nombradas anteriormente, mi blog no es un diario, (aunque la intención fue crearlo con ese fin), en primera instancia porque su razón de ser es convertirse ante todo en un medio de comunicación, por eso existe una depuración a la hora de redactar y escoger los temas, transformándose a la vez en un ejercicio constante de aprendizaje y porque no de interacción con personas de otras culturas que como yo, están interesados en desarrollar temas culturales y de actualidad.

También es una manera de mostrarme tal como soy, porque a la hora de escribir desnudamos nuestra manera de pensar y de ver el mundo, fomentando así una manera de decir que todavía estoy vivo, apoyándome en el pensamiento de ese gran filósofo francés conocido como René Descartes que promulgó la frase “ Pienso luego existo”.

MANÁ “COMBATE CON AMOR”

Ayer navegando por el zaping de los canales de televisión encontré que un canal musical mejicano, le estaba realizando una entrevista a un grupo que en una época de mi vida marcó un hito en mi gusto musical, se trata de MANÁ, que después de haberse tomado un año sabático, decidió sumergirse en la producción de su nuevo álbum denominado “ AMAR ES COMBATIR”, del cual ya suena con fuerza en las estaciones de radio su sencillo “ Labios compartidos”.

Para los que no conocen de este grupo, su semilla germinó durante la década de los ochenta en la ciudad mexicana de Guadalajara, cuando un grupo de adolescentes, con muchas ambiciones decidieron crear una banda llamada Sombrero Verde, donde interpretaban covers de grupos como The Beatles, Stones, Led Zeppellin y The Police. Posteriormente tuvieron la osadía de componer sus propios temas, creando un estilo que mezclaba el rock con vertientes más latinas como la salsa y el reggae.

Pero fue realmente en el año 1986 que adoptaron el nombre de MANÁ, para así darle una proyección internacional, con Fher Olvera como vocalista y los hermanos Ulises y Juan Diego Calleros en guitarra y bajo. Posteriormente entraría a formar parte del grupo un joven y excelente baterista de origen cubano – colombiano, conocido como Alex Gonzáles.

En este mismo año el grupo mexicano firma con la disquera Polygram y da comienzo una nueva era editando un disco homónimo que participa de manera importante en el movimiento musical “ Rock en tu idioma”. Sin embargo a pesar del éxito obtenido, este trabajo musical no dejó del todo contentos a sus creadores.

En el año de 1989 se grabó el álbum FALTA AMOR, bajo el sello Warner Music, en donde su sencillo “Rayando el Sol”, se convierte en su primer gran éxito, lo que significó un primer disco de oro en México.

Pero fue en el año de 1992 , desde la salida de Ulises Calleros, (el cual se dedicó a representar al grupo) y la llegada de dos nuevos integrantes, el tecladista Iván Gonzáles y el guitarrista, César “Vampiro” López ( actual guitarrista del grupo Jaguares), en donde graban en Los Ángeles el álbum ¿Dónde Jugarán los niños?, que contiene temas como “Vivir sin aire”, “Como te deseo”, “ Oye mi amor”, Cómo diablos” , “ Te lloré un río” y “Me vale”, los cuales se han convertido en clásicos de su repertorio que les dio la oportunidad de realizar una gira mundial, ofreciendo 268 conciertos en más de 17 países de América , España y Suiza. Para 1994 Iván y “Vampiro”, dejan la agrupación.

Posteriormente Fher, Alex y Juan Diego, constituidos como trío se dan a la tares de hacer una serie de conciertos en la Unión Americana con la idea de grabar un álbum en vivo.

En el año de 1995, deciden regresar a su formación original como cuarteto, lo que genera que realicen audiciones a guitarristas provenientes de distintos países, encontrándolo en Aguascalientes México, bajo el nombre de Sergio Vallín, quien por su notable talento aporta un sonido distintivo en la guitarras otorgándole una evolución a la banda. Con esa nueva formación graban y editan el disco “ Cuando los Ángeles lloran”, con el que ganan una primera nominación a un premio Grammy. De esta grabación se destacan sencillos como “Déjame entrar”, “ No ha parado de llover” y “Hundido en un ricón”.

Después de sacar sus álbumes SUEÑOS LÍQUIDOS y REVOLUCIÓN DE AMOR, de haber realizado un desconectado en MTV, a la vez de compartir escenario con artistas como Santana, regresan para irrumpir de nuevo en el mercado musical con su álbum “AMAR ES COMBATIR”.

El título del álbum es extractado de un poema del Nóbel mexicano Octavio Paz y cuenta con la colaboración del ingeniero de grabación Thom Russo (Audioslave, Michael Jackson y Eric Clapton, entre muchos otros), el cual se grabó en tres meses y medio en Miami en THE HI FACTORY / CRITERIA , donde han grabado estrellas de la talla de Bob Marley y en donde han sido creados clásico mundiales como “Hotel California” de los Eagles.

Ahora sólo falta esperar a que MANÁ se desocupe de su etapa de promoción, para tener la oportunidad, como en los viejos tiempos, de gozar de su show en vivo, que por cierto es de gran calidad, gracias a la magia que tiene el grupo y de la majestuosidad que posee Alex al ejecutar la batería.

Así que lo que me queda de aquí en adelante es "combatir", pero por conseguir el dinero para la boleta del concierto.

Mis colecciones

Tengo entendido que todo aquel que colecciona algo es por la simple razón de suplir un vacío, bien sea emocional, existencial o que se yo, lo único que si sé, es que a mí me encanta.

Desde muy temprana edad he almacenado utensilios que para algunos son “chucherías”, pero para mí han marcado mi llegada a este mundo. Uno de ellos fue la colección de revistas de aventuras que mis padres me regalaban cada tarde después de llegar de su jornada laboral. Recuerdo con nostalgia la expectativa que me generaba la idea de encontrarme cada día con una nueva historia, que enmarcaban una lista de súper héroes criollos como “El Santo, El enmascarado De Plata”, que consistía en un luchador mexicano que peleaba contra seres sobrenaturales como vampiros, momias y demás seres espeluznantes, Kalimán, un hombre con un turbante blanco que siempre andaba acompañado de un pequeño llamado Solín, y Arandú, un joven musculoso con taparrabos, que parecía más bien una versión bizarra de Tarzán de los monos.

Posteriormente entraría a mi vademécum algunos ejemplares de los personajes de la DC Cómics, como son: Batman, Superman, Linterna Verde e igualmente de la Marvel, como: Hulk, Spiderman, Los cuatro fantásticos, en fin.

Todos esos números o fueron regalados o simplemente se los robaron, el hecho es que no quedó ni la muestra.

Por tal razón me di la tarea de reiniciarla y la vez complementarla con otra de figuras de acción, que por cierto conservo como un gran tesoro.

Los primeros los encontré en una promoción en un almacén de cadena, consistía en las figuras relegadas del capítulo I de la saga de Star Wars, conocida como “ La Amenaza Fantasma”, los cuales fui adquiriendo poco a poco, después los fui reemplazando por algunas colecciones de bomberos, hombres de construcción,( todos articulados), hasta llegar a comprar algunos personajes de películas de moda, como fueron Los Hombres X y Jurasick Park.

Actualmente tengo alrededor de ochenta figuras y cincuenta revistas, sin embargo todo no termina allí, porque debido a mi afición por los reportajes me suscribí por un año a la revista GATOPARDO, así que en síntesis me considero un coleccionista compulsivo.

Lo único que me atrevo a expresar que aqueja a este gremio es el presupuesto.

Así que usted lee este artículo y quiere convertirse en un buen samaritano, no lo dude, salga al primer almacén donde vio las figuras de la película Superman Returns y descreste a este buen hombre con un excelente regalo.

El cine me cambió

El séptimo arte no sólo ha influenciado a los grandes escritores y periodistas, también lo ha hecho conmigo.

Desde que tengo uso de razón la magia de la oscuridad, ambientada por una gigantesca pantalla promovida por un proyector, ha cautivado mis prolongadas horas de ocio. Incluso los acompañantes como las crocantes crispetas y la refrescante gaseosa han pasado a un segundo lugar, primero por el alto costo que implican y segundo porque la prioridad es presenciar la narración de una buena historia.

Recuerdo con nostalgia la primera película que mis padres me llevaron a ver, se llamaba “El niño y el Toro”, si no estoy mal es la historia de un pequeño que se encariña de un Toro, el cual posteriormente es indultado. En esa época las salas carecían del confort, aspecto que contrasta con las que encontramos actualmente, así que uno observaba especimenes como gatos e insectos que igual a uno eran fanáticos a la “máquina de sueños”.

Cada uno de esos recintos ha desaparecido de la ciudad transformándose en su mayoría en iglesias cristianas, sin embargo los centros comerciales se han ido posicionando con sus Múltiplex, en donde el aire acondicionado impregna hasta el más recóndito de los sentidos.

A medida que pasaba el tiempo comencé a tener el criterio de escoger mis propias películas, así que descubrí las impecables animaciones de Walt Disney, y posteriormente me interesé por la saga de “La Guerra de las Galaxias”, desde ahí la afición por la ciencia ficción se disparó en mí, lo que generó que presenciara la obra maestra de Steven Spielberg, “E.T el extraterrestre”, ( antes había visto , Encuentros cercanos del tercer tipo), Tiburón, Poltergeist, Regreso al Futuro, ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, entre otras. Igualmente fui seguidor de películas de acción como las de Silvester Stallone, Arnold Schwarzenegger, Chuck Norris, Jean Claude Van Damme, Steven Seagal y muchos más.

Sin embargo en el momento en que ingresé a la Universidad a estudiar Comunicación Social y Periodismo, mis gustos se fueron transformando en algo más selecto. Es como si después de años de ingerir hamburguesas y perros calientes, comenzara una rigurosa dieta de caviar.

Y es desde ese instante en que descubro otras posibilidades como la que ofrece el cine independiente, autores como: Woody Allen, Steven Soderbergh, , Spike Lee, Alejandro Amenábar, Alejandro González Iñárritu, Alfonso Cuarón, Arturo Ripstein, en otros aportaron mucho en mi óptica del cine alejándome temporalmente de los aspavientos de los efectos especiales para introducirme en historias más dramáticas que le pueden pasar al vecino e incluso a uno mismo.

Actualmente considero que tengo un recorrido más amplio que antes a la hora de catalogarme como espectador., ( todavía recuerdo cuando soñaba con ser reseñista de películas, en un diario de la ciudad), ahora no me interesa sino disfrutarlas bien sea por medio del DVD, por cuestiones de presupuesto, o simplemente verlas por canales de televisión. Sin embargo a pesar de inyectarme una buena dosis de películas élite, todavía no me despojo de mi gusto por películas con temáticas de super héroes que me entretienen a montón.

No se si sea un cinéfilo, pero de lo único que estoy seguro es que el cine cambió mi forma de ver la vida.

En Cali sí hay cultura

Muchos caleños se quejan que en la ciudad no se ha desarrollado un movimiento cultural fehaciente, como si lo tuvo en la década de los setentas, cuando en la Capital del Valle del Cauca confluían varios artistas que posteriormente emigraron hacia Bogotá.

Personajes Como Fanny Mickey , Carlos Mayolo, Luis Ospina, entre otros, marcaron una época desde distintas expresiones del arte como fueron : el teatro, el cine, la literatura y la plástica. Sin embargo algunos decidieron quedarse para dar la pelea como es el caso de Miguel Gonzales, ( curador de arte del Museo La Tertulia) y los diferentes gestores culturales que exponen sus trabajos desde las salas de teatro de esta calurosa urbe.

Cada fin de semana Alvaro Arcos, ( director de Cali Teatro), se encarga de ofrecer un variado repertorio dirigido a jóvenes y adultos de jueves a viernes y los domingos se trabajan montajes especiales para los pequeños. Lo mismo ocurre con Lucy Bolaños
( directora del teatro la Máscara), en donde también desarrolla talleres en esta temporada de vacaciones y ni que hablar del TEC ( Teatro Experimental de Cali), que a pesar del fallecimiento de su mentor , Enrique Buenaventura, siguen trabajando para mantener el legado de su maestro. Igualmente grupos como el Teatro Esquina Latina dirigido por el médico Orlando Cajamarca, que se encarga de realizar una función social, generando proyectos para rescatar a la juventud de las drogas y la violencia que se vive en los barrios marginales, enseñándoles a canalizar toda esa energía a través de las artes escénicas.

Pero también han aparecido nuevos rostros en el campo del medio audiovisual y es el caso de Antonio Dorado con su película “ El Rey”, que logró nominación a los premios Goya y Oscar como mejor película extranjera y Oscar Campo con su largometraje “Otros”, que actualmente se encuentra en Postproducción, ( ambos docentes de la Universidad del Valle).

Lo más importante de todos estos procesos es que no han sido fáciles de realizar, todos han sido sueños que se ha gestado durante años, gracias al tesón de sus fundadores y que poco a poco se han ido posicionando mediante una batalla campal por el hecho de lograr un ideal.

Agradezco a aquellos que han sembrado la inquietud por la cultura y el arte, pero ojalá nazcan nuevas generaciones que se encarguen de expandir y de darle continuidad a un sueño del cual aspiro nunca despertar.