DREDD, EL JUEZ QUE NECESITAMOS EN CALI.

De esta historia, y mejor aún de este personaje, ya teníamos referencia. Fue en 1995. cuando Silvester Stallone interpretó a este intrépido juez en una película dirigida por Danny Cannon. 

Ahora la entrega es en 3D y es mucho más agresiva. La historia inicia con el asesinato de tres personajes de una banda liderada por Mama, una ex prostiuta que logra escalar en la jerarquía del hampa. Ellos son lanzados desde una construcción de doscientos pisos, pero antes les han inyectado una droga conocida como SLO -MO, que genera que los cuerpos caigan con más peso. Dredd decide investigar  el caso en compañía de su pupila, una psíquica que está en periodo de prueba. Los dos asumen el reto de arrestar a uno de los miembros de la banda para obligarlo a que confiese. Sin embargo Mama decide obligar a un inerme hacker a que cierre la edificación y así decide poner precio a  las cabezas de los dos jueces para poder acorralarlos. Sin embargo Dredd es un hueso duro de  roer.

La interpretación del juez  Dredd  corre por cuenta de Karl Urban. Lo interesante es que jamás le vemos el rostro al actor. Según en una entrevista que  Urban le da a un medio, esa situación le exigió más para que el  personaje expresara lo que era en esencia. 

La peli contiene escenas con una estética de los vídeo juegos ( primeros planos de balas atravesando cabezas, ralentización, etc). El contenido es de violencia explícita. Lo curioso del asunto es que como la historia se vende como la de un super héroe futurista, la mayoría de público es infantil y para ser sincero, ése es el menos indicado.